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Redacción central

Presidenta Añez visita al zorro Antonio en La Paz

La presidenta Jeanine Añez expresó el miércoles su satisfacción por el pronto retorno del zorro Antonio a Oruro, para estar con la familia que lo adoptó desde que era pequeño.

"Visité al zorro Antonio y estoy muy feliz de saber que pronto volverá a su hogar a reunirse con su familia, quienes lo cuidaron desde que era un cachorro", escribió la Jefa de Estado en su cuenta de Twitter (@JeanineAnez) luego de visitar al animal silvestre en el bioparque Vesty Pakos de La Paz.

Una cruzada en las redes sociales y varios escenarios mediáticos, en la que también intervino el propio ministro de Gobierno, Arturo Murillo, pidió devolver al zorrito andino al hogar que lo adoptó desde pequeño, logrando finalmente ese cometido.

EL TRAYECTO

Luego de todo un periplo que lo llevó hasta ciudad de La Paz, el zorro Antonio está a un paso de volver con familia que lo rescató en Oruro, así lo confirmaron su amo Cristian Boris Velasco Morales y el alcalde orureño, Saúl Aguilar Torrico.  

“Hace más de ocho días atrás, el zorro Antonio se nos fue arrebatado de la familia a título de ‘rescate’ por quienes pretendían quedar como héroes de la película, hace más de ocho días todo un ejército de personas comprometidas se pusieron en pie de guerra para verdaderamente rescatar a Antonio. Hoy podemos decir que el zorro Antonio está a un pasito de volver al seno de su familia y de su manada”, afirmó Morales.

“Gracias por todo el apoyo a la familia entera, pero más a las personas que se movilizaron en las redes sociales y en las distintas reuniones con nuestras ‘dichosas autoridades’ para lograr que Antonio esté en puertas del único hogar que conoce, lugar donde es un miembro más de la familia”, agradeció el dueño del zorro.

Mientras que, el Alcalde orureño confirmó que “hay el compromiso de la familia para adecuar el hogar de Antonio para que tenga todo lo que necesita un animal silvestre”.

RESCATADO

El zorro Antonio fue “capturado” hace más de una semana por Zoonosis y llevado al Zoológico Municipal de Oruro, la familia que lo adoptó, pidió que lo devuelvan, ya que desde cachorro fue criado como si fuera una mascota “doméstica” y fue rescatado de un grupo de personas que lo vendían en la calle.

En su momento, Boris Velasco denunció que algunas personas, de diferentes departamentos del país, que se decían ser activistas de defensa de los animales, se acercaron a su familia con oscuras intenciones, para supuestamente ayudarles, pero que por el contrario, lo único que lograron fue que Antonio sea llevado a la sede de Gobierno, provocando más dolor.

“Vinieron algunos activistas y nos prometieron que nos ayudarían, al contrario, lo que lograron es que Antonio sea alejado y llevado lo a La Paz”, denunció Morales, anteriormente en las redes sociales.   

Fueron las redes sociales en las que, los cibernautas protestaron para que el zorro Antonio sea liberado y entregado a su familia. La presión y la polémica fue tanta que hasta el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, pidió al Ministerio de Medio Ambiente, que realice las gestiones para que Antonio vuelva a casa.

Finalmente, la presión dio resultado y en cuestión de días el zorro volverá con la familia que lo alimentó desde que era un cachorro.

 

ANTONIO SUFRE

Para la activista y defensora de Animales SOS Bolivia, Susana Carpio, el zorro Antonio, está sufriendo por culpa de todos, incluidas las personas que decidieron criarlo y que “murió en vida” como animal silvestre.

“Antonio murió en vida como animal silvestre cuando tomaron la decisión de mascotizarlo. Su destino es una jaula, puede ser de oro pero seguirá siendo una jaula; la ley debe aplicarse, el animal no debe volver con la única familia que tuvo desde bebé, porque lo contrario sería ‘incorrecto’”, afirmó, en entrevista con El Alteño.

ES ANIMALES SILVESTRES

Según Protección Animal en el Mundo (del inglés World Animal Protection), millones de aves, mamíferos, peces y reptiles son parte de las mascotas exóticas que las personas tienen en todo el mundo. La mayoría de los dueños los compran, porque se consideran amantes de los animales, pero “lamentablemente las necesidades y los comportamientos naturales de un animal silvestre no se pueden satisfacer en nuestros hogares”, aseguran.

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