El trabajo sexual crece en El Alto y baja la demanda
El trabajo sexual en el municipio de El Alto se ha incrementado en la post pandemia por el coronavirus y ahora se llegó a duplicar por la “crisis económica” en el país, se confirmó desde la Organización de Trabajadoras Nocturnas de Bolivia (OTNB).
Pero contrariamente y para la preocupación del sector asentado en la zona 12 de Octubre, la demanda del servicio nocturno bajó hasta en un 50%, desde mediados del pasado año, aseguran. Y la tarifa, que varía (no se dio a conocer de cuánto a cuánto), se mantiene.
“Sin temor a equivocarnos podemos decir que se ha duplicado (el trabajo nocturno de mujeres), en El Alto lo propio pues los lugares donde ejercemos nos quedan insuficientes, ya cada día vemos rostros nuevos ejerciendo el trabajo sexual”, contó la presidenta de la OTNB, Aylin Aparicio.
Adelantó que se trabajará en un mapeo con el Ministerio de Salud para confirmar una cifra. Cuestionó la crisis económica en el país. “En Bolivia no podemos decir que tenemos segura la canasta familiar, ya que día a día se va incrementando más y más”, indicó.
MAYOR
La cifra puede ser mayor, pues no todos quienes se dedican al trabajo sexual en la urbe alteña, más mujeres que hombres, son parte de la OTNB. Están las trabajadoras particulares, que ofrecen sus servicios en las redes sociales, alojamientos y moteles, también están las “autogestionarias”, son aquellas que se agrupan entre cinco y seis personas que alquilan un local aparte.
Estos grupos, representan una competencia para las trabajadoras nocturnas parte de la OTNB, dicen, más ahora que la demanda de los clientes bajó, aseguran, por la “crisis económica” que se vive en el país por el incremento de los productos de la canasta familiar, la falta del dólar y del diésel.
“La crisis incluso a nuestro sector está afectando, no hay ingresos. Las compañeras, con mucha suerte están llevando lo justo para el pan del día, ya no hay para poder ahorrar, yo creo que esta crisis a todos; gremiales, asalariados, nuestro sector y demás afecta”, indicó.
El sector no piensa en subir la tarifa, que varía, indicaron, según lo que pide la trabajadora nocturna. Solo se debe pagar la pieza al propietario del local y que llega a costar 10 bolivianos, que también se mantiene y de incrementarse, la OTNB se movilizará, anunciaron.
“No tendría que subir, sino nosotras no estamos pudiendo incrementar (el cobro del servicio), sería una lucha nueva de la organización para no dejar que se incremente el precio, que definen los dueños de los locales”, advirtió otra de las representantes.
ALOJAMIENTOS SOSPECHOSOS
La OTNB denunció la apertura de más alojamientos en la zona de Octubre de la ciudad de El Alto, sólo con el aparente fin de que jóvenes presten servicios sexuales en el lugar. Algunas de ellas menores de edad
La queja fue elevada a la misma Alcaldía alteña, a la Policía y a la Gobernación de La Paz, por lo cual en los últimos días se iniciaron operativos, donde al final se rescató a menores de edad que, supuestamente, eran prostituidas.
DOBLE MORAL
Las trabajadoras nocturnas son mal vistas, censuradas y juzgadas. Pero también han sido víctimas de ataques violentos en la zona 12 de octubre, por parte de los vecinos, dieron a conocer.
Muchas son madres de familia, que al no encontrar otra forma de trabajo se dedican a la prostitución. Después de la pandemia por el Covid-19, ya no solo se las ve ofrecer sus servicios durante las noches, en el día se las ve en las calles 7, 6 y 5 de la Ceja.
Muchas llevan el barbijo en el rostro para no ser identificadas. Los hombres se acercan a ellas y las identifican para luego pagar sus servicios en los lenocinios que están en la 12 de Octubre, hace ya muchos años.
“Nos han llegado a golpear con palos, los vecinos, pero ellos son de doble moral, porque abrieron alojamientos para prostituir a otras mujeres”, contó una trabajadora sexual.
“No hemos subido la tarifa, porque no hay la demanda, no hay clientes, están priorizando la canasta familiar”.
Aylin Aparicio
OTNB
“Los vecinos tienen doble moral, porque nos juzgan y después están abriendo alojamientos (en la 12) para prostituir”.
N.N.
Trabajadora sexual