Trump pone al Servicio Secreto bajo riesgo del Covid-19
Los guardaespaldas del Servicio Secreto que protegen la Casa Blanca están siempre listos para "recibir una bala" con tal de salvar al presidente Donald Trump, pero ahora el peligro es el mismo mandatario, contagiado de Covid-19.
La negativa del presidente de Estados Unidos a usar mascarillas en la Casa Blanca contribuyó a la propagación del coronavirus en su círculo y entre sus asistentes, incluyendo posiblemente a decenas de agentes del Servicio Secreto, según varios reportes de medios.
Mientras todavía era paciente en el hospital militar Walter Reed, Trump atizó el riesgo cuando dispuso que un equipo del Servicio Secreto lo acompañara cuando salió a saludar a sus simpatizantes.
Trump y sus guardaespaldas usaron mascarillas, pero estaban todos en un mismo vehículo con las ventanas cerradas, en un momento en el que los expertos consideran que el presidente estaba en un estadio muy contagioso de la enfermedad.
"Esto es una locura", criticó en Twitter el médico del hospital Walter Reed James Phillips, que prescribió que todos los que participaron en el paseo sean puestos en cuarentena durante 14 días.
"Pueden enfermarse. Pueden morir. Por una puesta en escena política", agregó.
El portavoz de la Casa Blanca, Judd Deere, indicó que habían tomado las "precauciones adecuadas" durante el paseo. "El movimiento fue autorizado por el equipo médico", agregó.
Dada la desventaja en las encuestas frente a su rival demócrata, Joe Biden, Trump viajó por todo el país para animar mítines y ceremonias de recaudación de fondos, sin requerir el uso de mascarillas ni respetar la distancia social.
Debido a una consigna de "sensibilidad operacional" el Servicio Secreto no confirma informaciones sobre cómo los ha afectado el Covid-19.