Comerciantes se dan modos para luchar contra el virus
A falta de piletas públicas, improvisan baldes, usan barbijo, guantes y algunos visten trajes de bioseguridad. Así los comerciantes se dan modos para cumplir con las medidas de bioseguridad y continuar con la venta de sus productos.
Las vendedoras de comida principalmente, ahora ven la manera de aumentar los hábitos de limpieza, para ello improvisan baldes con orificio para que parezca una pila. Algunas traen el agua desde sus casas, otros se hacen regalar de la tienda más cercana, mientras que las pensiones evitan este sacrificio extra.
Asimismo, a fin de continuar con la venta de comida, las caseritas deben invertir en jaboncillo líquido hasta el sanitizador y en algunos casos para alcohol en gel.
En las peluquerías, de la misma forma, debido al contacto directo hay entre los peluqueros y sus clientes, también instalaron un balde de agua para el aseo.
“Nosotros también tenemos miedo, no salimos por capricho sino porque vivimos de este negocio por varios años, las caseritas nos necesitan y nosotros hacemos todo lo posible para cuidarlas y cuidarnos nosotros también”, comentó una vendedora de carne de cerdo de la calle 5 de Villa Dolores.
Ninguna de ellas se puede dar de lujo de paralizar porque viven de la venta del día, incluso las carnicerías, pusieron a la vista de los clientes el alcohol desinfectante, porque constantemente manipulan dinero, por lo tanto, el comprador debe desinfectarse las manos, antes y después de realizar el pago.
PILETAS PÚBLICAS
Pese a que antes de determinarse la cuarentena rígida, dirigentes afiliados demandaron a las autoridades municipales, la instalación de piletas públicas, esto no se efectiviza, y varios sectores de expendio de alimentos masivos continúan sin las medidas de prevención necesarias.
Ahora las comerciantes, han incluido en su carretilla, junto a la comida para vender, su balde de agua y elementos de limpieza, pues el agua y el jabón en plena pandemia son más que una necesidad básica.
DEMANDAS PENDIENTES
Queda aún pendiente las demandas de las comerciantes que venden en la noche, si bien las ambulantes, ahora salen en las mañanas, reduciéndose el espacio de venta al mínimo, quedan algunas que aún no pueden salir, como las vendedoras de comida rápida.
Al respecto, su dirigente, pide a las autoridades municipales trabajar en otras medidas paliativas para el sector, ya sea para que puedan retomar su actividad u otras alternativas económicas.