Venezolanos luchan contra el hambre y la pandemia
La crisis política y social que afronta Venezuela desde hace más de 10 años, obligó a una gran parte de su población dejar su tierra y emigrar a países vecinos para comenzar una nueva vida. Bolivia se volvió uno punto de alojo para los venezolano, que con sus familias, llegaron a la nación y a ciudades como La Paz y El Alto. Y en medio de la pandemia continúan sus vidas encarando una doble lucha que consiste en no enfermarse y no morir de hambre.
“A ti venezolano, que te encuentras en Bolivia, te digo, esta es una gran oportunidad que está dando esta nación, así que aprovéchala y trata de luchar; tarde o temprano, verás cómo te va a llegar la recompensa”, recomienda Melvyn Mendoza en un video difundido en las redes sociales por la embajada de Venezuela en Bolivia. El audiovisual es parte la campaña “TODOS SOMOS IGUALES” lanzada recién por la entidad diplomática.
“Como parte de las acciones que se realizan desde la Embajada de Venezuela en Bolivia para ayudar a la diáspora venezolana, se dará inicio a la campaña ´TODOS SOMOS IGUALES´ a través de un material audiovisual que destaca el trabajo diario que realizan los venezolanos en el país del altiplano”, se informó.
La campaña tiene como objetivo principal rescatar el buen nombre del gentilicio, exhibiendo en una pieza de 1.37 minutos la historia de un venezolano emprendedor que a pesar de las dificultades supo encontrar a través de la resiliencia el modo para mantener a su familia y aportar al mismo tiempo a la economía y la salud en Bolivia en tiempos de coronavirus.
El video cuenta la historia de Melvyn Mendoza, un trujillano Ingeniero en Telecomunicaciones que emigró a Bolivia, con su familia, hace 4 años, tiempo en el cual ha tenido oportunidad a través de su profesión contribuir a la mejora de servicios de telecomunicaciones de importantes empresas estatales y privadas del país.
HISTORIA 2349
“Mi día a día empieza a las siete y diez de la mañana, mi esposa me ayuda con el desayuno, un rico café, tengo 37 años de edad. Mi nombre es Melvyn Mendoza y soy de Trujillo, Venezuela, hace cuatro años por medio de la dificultad que presentaba nuestro país, tomamos la decisión de emigrar acá a Bolivia”, cuenta en el video.
Mendoza habla dos idiomas y ha cursado especializaciones en comunicación en Estados Unidos, sin embargo, no pudo seguir ejerciendo su profesión como ingeniero y actualmente trabaja como delivery de una conocida aplicación de envíos rápidos y farmacéuticos.
“Esta iniciativa, que busca también hacer un llamado al valor que tienen los venezolanos en tierras foráneas y pretender hacer un alto a la xenofobia, implicará la difusión de varios videos en redes sociales donde los venezolanos que residen en distintos departamentos de Bolivia contarán sus historias y el trabajo en el que se desempeñe, para de esta forma dejar claro que “TODOS SOMOS IGUALES”, se destaca desde la Embajada de Venezuela en Bolivia.
ECONOMÍA INFORMAL
Según la ONG Unión Venezolana, muchos venezolanos viven de la economía informal, en los países donde radican desde cuando dejaron su tierra. "El 90% de los venezolanos viven de la economía informal (…) y a la mayoría se les está haciendo difícil con la pandemia, porque viven de los ingresos que hacen día a día", dijo Carlos Scull, el embajador para Perú.
"Nosotros hicimos un censo de vulnerabilidad desde el primer día en que comenzó el decreto de emergencia y hemos identificado a alrededor de 55.000 familias que están en peligro de desalojo inminente de sus viviendas", aseguró.
Reportes internacionales, como el de Acnur, observan que en momentos en los que se urge a la población a confinarse en sus casas, quedarse sin techo puede resultar un arma de doble filo:
"Cuando estás en la calle es muy difícil cumplir con el autodistanciamiento físico. Supone un riesgo de salud pero también de que haya actos de xenofobia contra los refugiados", indican.