Pasar al contenido principal
Redacción central

Color y energía en La Paz con artistas urbanos

Colores y formas van ganando al muro rayoneado y sucio. De a poco, brilla la naturaleza y las sonrisas de la gente que transita por las calles es un común denominador.

Y es que mientras Hefziba Martínez, conocida como “la Hef” y Aysha Micaela Yaksic Vera, “Mica”, pintan un muro en la zona de Sopocachi, el lugar se transforma con este arte urbano o arte callejero como muchos lo conocen.

Se dice que el arte urbano inició como vandalismo, pero ahora es una variante del arte que tiene muchos seguidores, porque con sus mensajes busca inspirar.

La Hef cuenta que pinta murales desde hace unos seis años atrás, “le meto alma, vida y corazón”, y si bien es autodidacta porque dejó sus estudios de la Escuela de Artes, porque necesitaba trabajar y expresarse, continuó su formación en talleres e investigó, pero fue en la calle donde aprendió a  perderle miedo al muro.

“Me gusta pintar chicas y a través de mi trabajo de liberación, trato de empoderar a las chicas. Pinté en todo lado y planeo irme más hacia los barrios, pinté en el centro y la zona sur me gusta el muralismo comunitario porque con un mural podemos proponer una idea, contar con el apoyo de los vecinos, conversamos sobre el tema y es lindo” afirma.

Reconoce que no cuenta con el apoyo de las autoridades para realizar sus murales, sin embargo eso no frena su deseo de ponerle color a la vida de los paceños.

“Todo es autogestionado, como no he terminado mi carrera, papelitos cantan, a veces me reúno con otras personas de más experiencia que hace la gestión cultural y yo pinto. Pero prefiero hacerlo sin trámites, a veces pido permiso para pintar y a veces no; pinto sobre lo que está rayoneado” dice Hefziba.

Se considera una anarquista, porque está en contra de la violencia hacia las mujeres, la producción de transgénicos y la quema de bosques entre otras cosas, “nos tapan la boca simbólicamente, la calle es un medio de denuncia y protesta. Matan ecosistemas, animales para imponer la soya transgÉnica. Si uno busca en todo el país están haciendo la temática de ‘territorios por la vida’ y es algo que gusta”.

PARA NIÑOS

Aysha acompaña a Hef en su trabajo de hacer arte en las calles, es licenciada en Diseño Gráfico, pero dejó un escritorio y una oficina para mostrar su arte al aire libre. Si bien su producción con stickers, en poleras e ilustraciones infantiles le daban buenos ingresos económicos, asegura que ahora aprendió a expresarse con mayor libertad. Participó de la Feria del Libro donde fue recibida con mucho éxito.

“Generalmente en mis dibujos expreso ternura algo que la gente se olvida, con tanta política la gente olvida a los animales y la naturaleza que es lo más hermoso para cuidar. Mis ilustraciones llaman la atención de los niños y empecé a hacer cuentos simples para niños. Gracias a Hef salí del formato digital, porque hago serigrafía y sublimación, pero ella me abrió a un mundo gigante que es el mural y se nota la diferencia de pintar algo chiquito a algo grande y es liberador, todo tu cuerpo expresa” asegura Mica cuya marca de sus productos se conoce como Aysha.

A futuro espera convertir la casa que tiene, en un centro cultural grande para incentivar a más personas para difundir su arte. Actualmente se reúne con otros artistas y ofrecen talleres y realizan trabajos juntos. 

Ambas artistas, coinciden en que la decisión de dedicarse al arte y más en las calles no fue del agrado de sus familias, pero al ver su felicidad, sus trabajos en diferentes barrios de la ciudad, su visión cambió y ahora destacan su fortaleza y las apoyan para continuar con su labor.

Además de pintar murales para los que también son contratadas, estas dos grandes artistas reciclan y venden productos como agendas, aretes, pines, stickers y pequeños cuadros que gustan a la gente y que las sigue a través de las redes sociales.

Las dos recomiendan a los jóvenes a no dejar sus sueños y que se animen a hacer lo que les gusta, y si bien la calle de por sí puede tener sus peligros, pueden pintar y dibujar y les dará un cambio en su vida. “Un mural tiene una energía y yo le pongo la mejor, cambio el ambiente y sale de la rutina, trae otro aire y pensamientos, es importante”.

En Portada