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Redacción Central

Juez ordena no hostigar más a Amparo Carvajal

En el contexto del conflicto por la Asamblea de Derechos Humanos (APDHB), el juez de sentencia penal primero de La Paz determinó que Amparo Carvajal sufre violencia psicológica y amenazas por parte de Édgar Salazar, a quien le ha ordenado que deje los amedrentamientos bajo advertencia de remitirlo a la Fiscalía.

“Se dispone que Édgar Salazar Limachi se inhiba de realizar estos actos de amedrentamiento evocados por la accionante y se prohíbe continuar con estos actos de hostigamiento y amedrentamiento en contra de la indicada ciudadana”, resolvió el juez en el marco de una Acción de Libertad.

El recurso de Carvajal se presentó para resguardar sus derechos mientras realiza una vigilia en la terraza de la APDHB, en demanda de recuperar ese predio que fue tomado por afines a Salazar hace más de un mes.

La autoridad judicial señaló que Carvajal merece doble protección al ser mujer y de la tercera edad, pero sufre violencia por hechos como la instalación de parlantes usados para hostigarla en su vigilia.

Señaló que se ha llegado al convencimiento de que Carvajal sufre violencia y se le vulnera su derecho a la salud. Además, se tomó en cuenta que Salazar no se presentó en la audiencia para dar su versión.

El juez advirtió que de continuarse con el amedrentamiento a Carvajal, se verá obligado a remitir los antecedentes al Ministerio Público para su investigación. En este conflicto, tanto Carvajal como Salazar reclaman la representatividad legal de la APDHB. La primera tenía el control de la sede de la entidad, pero en junio los afines a Salazar tomaron el predio.

El martes 11 de julio, la activista logró subir a la terraza de la sede, mediante una escalera. Desde entonces se mantiene en vigilia y sus seguidores denunciaron que sufre actos de violencia, con música con alto volumen de parlantes, además de gritos insultantes.   

 

SU LUCHA

Amparo Carvajal, que se disputa con Edgar Salazar la presidencia de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB), aseguró este miércoles que está consumiendo alimentos, después de que el viceministro Roberto Ríos denunciara que la activista de 84 años no quiere comer.

“Sí, sí, no se preocupen, el problema mayor es que no tengo baño”, dijo de manera escueta Carvajal después de que una periodista la consultara desde la calle si logró comer algo.

El martes, la experimentada activista sorprendió a todos al lograr subir hasta la terraza del edificio con la ayuda de una escalera y pasó la noche en el lugar, según su versión, “muy mal”.

“La pase muy mal porque el otro grupo sacó los altavoces de la Asamblea para insultarme insultándome. Es un nivel bajísimo sus insultos, pero lo que más duele es la mentira porque dicen que les habría cortado el agua y que soy una asesina”, lamentó.

Ayer en la mañana, algunos efectivos de la Unidad de Bomberos subieron hasta la terraza donde permanece Carvajal, pero ella se negó a recibir su ayuda y dijo que su lucha será “hasta morir”.

La APDHB está tomada por el grupo de Salazar desde el 2 de junio de este año y Carvajal trata de recuperar la posesión del edificio en disputa de manera incansable, manteniendo una vigilia y también mediante algunos recursos judiciales que, hasta el momento, no fueron favorables a su objetivo.

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