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Redacción central

Amantes se daban modos “para vaciar” alojamientos

Después de gozar de sus momentos de placer, una pareja de amantes se daba modos para robar los televisores, lámparas, frazadas y hasta las sabanas de los alojamientos de Santa Cruz donde ingresaban haciendo empanadas y se iban con las manos llenas de cosas hurtadas.

“El propietario de un alojamiento ubicado en la zona de Cañada El Carmen y Radial 10, no se dio cuenta del robo, pues recibió y trató al hombre como a cualquier otro huésped que entra al local con su pareja”, informó el responsable de la División Propiedades de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de Santa Cruz, teniente José Escobar.

El dueño del discreto local contó que una pareja de entre 30 y 35 años, el 21 de julio llegó al lugar a eso de las 21.00 horas y le solicitó una habitación en la cual pudiera dar rienda suelta a sus más pasiones amorosas.

“Una pareja vino con barbijos y el hombre muy amable me pidió una pieza para pasar la noche, era la primera vez que los veía por aquí, parecía una pareja muy acaramelada y estaban algo alcoholizados”, contó el administrador, según medios cruceños.

La pareja era exigente, pagó más de 60 bolivianos por adelantado para que le den una cómoda habitación con televisión por cable, ducha propia y vista a la calle. Al recibir el dinero, el administrador no dudó dos veces y les dio una de las piezas más caras de su alojamiento, era el número 31 que cumplía con todas las exigencias de los amantes.

SU PEDIDO

Antes de recibir las llaves de la habitación, el hombre le pidió una sola cosa, que por favor nadie les interrumpa porque tendrían una noche de intimidad alocada, el dueño accedió sin chistar y le dijo que en ese lugar siempre han sido muy discretos con sus clientes. Tras tomar las llaves, la pareja se dirigió a su momentánea morada.

MANOS A LA OBRA

Luego de unas tres horas de pasión descontrolada, al promediar las 03.00 de la madrugada, el hombre y la mujer se repusieron tomando unos energizantes y se pusieron manos a la obra.

Se cree que primero desconectó el televisor, las lámparas, el codificador para la señal para el tv cable, el tocador y la pequeña mesa que estaba al lado de la cama, para envolverlas y amarrarlas con las mismas frazadas para sacarlas por la ventana.

A esas horas de la noche, cuando la mayoría de los cruceños están en pleno sueño acurrucados a sus almohadas, la pareja de delincuentes convocan a otros de sus cómplices para que, desde afuera de la ventana, en la calle, reciba el botín que bajaba amarrado en las colchas enlazadas y sin que nadie se diera cuenta.

Tras desvalijar la pieza, la pareja de amantes salió del hospedaje alegando que tenían que ir de emergencia a la terminal Bimodal de Santa Cruz, para viajar por problemas familiares.

El administrador no les dio mucha importancia y al cabo de unos minutos mandó a sus trabajadores para desinfectar y limpiar la pieza. Sus trabajadores se asustaron al ingresar a la habitación que estaba totalmente vacía, sin televisión, sin camas, sin el tocador y hasta sin las toallas del baño. Llamaron al dueño y a la Policía para reportar el delito.

CÁMARAS

Gracias a las cámaras de seguridad del local, los agentes de la policía detectaron que el televisor fue vendido en una casa de empeño a 200 bolivianos en el Mercado los Pozos y luego, el jueves, lograron atrapar al hombre que fue identificado con el nombre de Julio R.L.; no obstante, su amante y el otro cómplice aún no fueron capturados y la Policía les sigue los pasos.

Según el responsable de la División Propiedades de la FELCC cruceña, teniente José Escobar, no es la primera vez que esa pareja activa el mismo modus operandi porque recibieron similares denuncias semanas antes, es por esa razón que exhortó a la población que fue víctima de esos delincuentes, que presenten sus denuncias en oficinas policiales.

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