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Redacción central

Abuelitos “abandonados a su suerte” vencen al Covid

Como un milagro se califica que la mayoría de los abuelitos del Hogar San Martín de El Alto, que se contagiaron con coronavirus, hayan salvado su vida venciendo al virus que atacó implacablemente a las personas de la tercera edad.

Se trata de nueve varones y nueve mujeres adultos mayores, algunos con enfermedad de base, que hoy sonríen y bailan. “Gracias a Dios, estos adultos mayores que incluso tienen patologías de base están bien, están estables, ahora están alegres, están contentos, ya han recuperado su ánimo incluso”, destacó el director General del hogar, Gregorio Condori.

UNIDOS

Cuando todo parecía perdido, al final el mal momento y la poca respuesta de los responsables de salud, sólo logró unir a los familiares de los ancianos y a los trabajadores del Hogar San Martín que jamás deslindaron su responsabilidad frente a la emergencia sanitaria. Es también destacable la respuesta de dirigentes vecinales y vecinos de la zona San Felipe Seke del Distrito 4 (D-4), donde se ubica el hogar, que no es un acilo.

Todos se organizaron para buscar medicamentos, incluso yerbas medicinales, además los vecinos llevaron alimento al hogar. “Más que todo ha sido la población, había personas de buen corazón que hacían llegar carne, verduras”, recordó Condori.

A finales del mes de junio, el Municipio de El Alto informó sobre el masivo y repentino contagio de los adultos mayores del Hogar San Martín, con coronavirus. Incluso ya habían fallecido cinco de ellos.

En la casa privada para ancianos, que es administrada por la Fundación Cuerpo de Cristo del desaparecido padre Sebastián Obermaier, el coronavirus llegó de la noche a la mañana. “De la noche a la mañana todos aparecieron con positivo, hasta el padre (Eugenio Scarpellini) estaba positivo, no sabíamos de dónde había entrado el Covid al hogar San Martín”, dijo Condori.

Según el director General, solo llegó una brigada en tres oportunidades para tomar la temperatura, oxígeno y el pulso a los ancianos, y luego no volvió.

MUERTE DE SCARPELLINI

Tras lo ocurrido en la Casa San Martín, en junio la Alcaldía anunció que se crearía el primer centro de aislamiento para adultos mayores en el mismo hogar. Sin embargo, tampoco se concretó debido a que no se contaba con el equipamiento ni el personal especializado. Además, que los trabajadores también contrajeron coronavirus.

Henry Contreras, que es secretario Municipal de Atención Ciudadana y Gobernanza de la Alcaldía alteña, reconoció la imposibilidad de crear el centro de aislamiento para los abuelitos sobre todo luego del fallecimiento de Monseñor Eugenio Scarpellini.

Aseguró que se prestó toda la ayuda posible al Hogar San Martín y que se hizo las gestiones ante el SEDES para que los abuelitos sean llevados al Centro de Aislamiento de La Paz y al no ser posible, se pensó que el hogar sea un centro de aislamiento.

Aún se espera la tercera prueba PCR de los 18 adultos mayores que fueron mejorando, para descartar totalmente el coronavirus en ellos.

Fundado por el padre Sebastián Obermaier

El Hogar San Martín fue creado y fundado por el desaparecido padre Sebastián Obermaier en 2009, para recibir a adultos mayores extraviados o abandonados por sus familias.

“El padre Obermaier tenía ese espíritu de sacerdote de hacer presencia de Jesús en la tierra con ese espíritu él, a parte de construir las 71 iglesias en la ciudad de El Alto, tenía la motivación de proteger a la población vulnerable y la población vulnerable que prácticamente son los niños y los adultos mayores”, dijo Gregorio Condori.

Apoyo con pañales y oxígeno

El Hogar San Martín del D-4 sale de una de las etapas más difíciles que le tocó vivir por la pandemia del coronavirus, sin embargo, aún requiere de ayuda con pañales, oxígeno y alimento.

“A la población seguimos pidiendo ayuda, para que nos pueda apoyar con oxígeno, pañales que es lo que más se necesita y es lo más costoso, si pueden raciones secas de alimento, arroz, azúcar que se va cada mes”, dijo el director General del Hogar San Martín.

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