Recreos familiares pasan prueba de bioseguridad
Restaurants y recreos familiares de El Alto, pasan la prueba de bioseguridad y solo esperan la orden de las autoridades municipales para reabrir sus puertas al público de esta urbe.
Dentro ese marco, funcionarios de la Alcaldía de El Alto inspeccionaron ayer varios restaurants y entre ellos el recreo familiar "El Carmen" de la zona de Villa Adela, para controlar el cumplimiento de las medidas de bioseguridad antes que reanude sus actividades, al 50% de su capacidad, informó este jueves la secretaria municipal de Desarrollo Económico, Ana María Saavedra.
"Hacemos la inspección y revisión a este recreo familiar de que cumplan con las medidas de bioseguridad desde el ingreso, en la atención y la salida de los comensales", explicó.
Detalló que en El Alto existen al menos 35 recreos familiares, en los 14 macrodistritos de El Alto, que estuvieron cerrados desde el inicio de la pandemia por el Covid-19, por lo que se continuará con estas inspecciones para autorizar, en el corto plazo, su reapertura.
Adelantó que estas inspecciones continuarán en los demás recreos familiares de esa urbe. Saavedra estuvo esta mañana en el recreo "El Carmen", ubicado en la zona de Villa Adela, y tras realizar esa inspección indicó que entre las medidas de bioseguridad está la habilitación intercalada de mesas para ocho personas, es decir, una mesa si y otra no.
Además, en el sector de la caja para pagar el consumo habrá distanciamiento de metro y medio, y el personal debe asumir con mucha responsabilidad las medidas de bioseguridad, como es el uso constante del barbijo y el alcohol en gel, además de la desinfección permanente de los ambientes.
Por su parte, el propietario del recreo familiar "El Carmen", Moisés Pacajes, reiteró que esta actividad económica cuenta con pediluvios, además de un botiquín de primeros auxilios y un tanque de oxígeno, ante cualquier eventualidad que se presente al interior de ese restaurante.