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Redacción central

Desalmada tía encadena a su sobrino de 15 años

Un adolescente de 15 años que padece discapacidad intelectual fue encadenado por su tía. La víctima logró escapar de la casa donde era sometido a tratos inhumanos y fue encontrado en La Paz arrastrando las viejas y pesadas cadenas.

“No me daban de comer, me encerraba en un cuarto y me llevaba a pedir limosna en las calles”, es lo primero que relató el joven al ser liberado de las cadenas que son símbolo de esclavitud.

Una vez más, las redes sociales sirvieron para advertir a las autoridades la presencia del joven que es oriundo de la ciudad de Oruro, quien logró escapar de los malos tratos al que le sometía su tía que ahora fue aprendida por miembros de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV).

En medio del llanto, el menor contó que su tía le sacó del hogar “Crecer” de la ciudad de Oruro para llevarlo a vivir con ella, pero después de un tiempo fue trasladado a El Alto.

El asustado y descuidado, el jovencito relató que durante días deambuló por las calles de El Alto, luego decidió trasladarse a La Paz para conseguir algo de comer y quitarse las cadenas y candados que su tía Betsabé le puso en sus pies.

APREHENDIDA

Tras conocer el hecho, funcionarios de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia de la Alcaldía paceña en coordinación con la FELCV, aprehendieron a la desalmada tía y fue conducida a celdas policiales acusada de abusos contra el menor.

Según el reporte médico, el adolescente fue encontrado en vía pública y serias tiene cicatrices de lesiones antiguas.

Ya en celdas policiales, la tía intentó justificar los abusos aduciendo que el adolescente. “Se escapaba mucho y no entiende nada”, atinó a decir en su defensa, sin explicar del por qué lo sacó del hogar “Crecer” para luego someterlo a vejámenes.

Según los primeros reportes de la FELCV, la mujer pretendía explotar laboralmente al adolescente haciéndole pedir limosna en las calles aprovechando la discapacidad que sufre.

Durante dos meses y en medio de la pandemia, el muchacho salía a las calles de El Alto a ganarse unos pesos para su tía quién además se beneficiaba con el dinero que el joven se ganaba pidiendo limosnas.

“No me daban de comer, me encerraba en la casa y me llevaba a pedir limosna. Me golpeaban cuando no traía plata. Después me ha traído a El Alto, donde también me sacaba a las calles a pedir limosna y no me dabas comida”, relató el adolescente.

La mujer se encuentra en celdas policiales, enfrentará cargos ante la justicia por el delito de trata y tráfico de adolescente con fines de explotación laboral.

Créditos
ROLANDO FLORES S. rolosotomayor@gmail.com

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