Víctimas de Senkata recuerdan cinco años de los sucesos con un acto en el lugar
19 de noviembre de 2019. El sol caía a plomo, la planta de Senkata estaba custodiada por militares y policías y fuera del perímetro miles de ciudadanos permanecían en el lugar bloqueando las salidas. La dirigencia alteña había pensado en un plan similar al de 2003 cuando dejaron sin combustible a la sede de Gobierno. Cerca del mediodía estalló la violencia y la tragedia.
Han pasado cinco años desde entonces, hoy hay un juicio instalado por ese caso en el que la principal acusada es la expresidenta Jeanine Áñez junto con dos exministros y exjefes militares que dirigían tropas aquel 19 de noviembre de 2019 y ocasionaron una decena de muertos y medio centenar de heridos.
Este martes las familias de Devi Posto Cusi, Pedro Quisberth Mamani, Edwin Jamachi Paniagua, José Colque Patty, Juan José Tenorio Mamani, Antonio Ronald Quispe, Clemente Mamani Santander, Milton Zenteno Gironda. Rudy Cristian Vásquez Condori que falleció el 20 de noviembre producto de las heridas sufridas en Senkata y Calixto Huanacu Aguilar, hospitalizado en la UTI del Hospital de Villa Dolores, y que falleció al mediodía del 27 de noviembre serán recordados en un acto organizado por una federación que los aglutina.
“En memoria y homenaje a las ‘Víctimas de la masacre de Senkata’ se cumplirá 5 años de la masacre, torturas, ejecuciones sumarias, graves violaciones a los derechos humanos”, señala la convocatoria a la que se prevé asistan autoridades locales y nacionales. Los actos se realizarán este martes en la zona 25 de Julio, Senkata, en el Distrito 8 de El Alto.
Las víctimas consideran que el juicio está incompleto porque no están muchos de los que participaron de esos hechos, y citaron a los ministros de Áñez que firmaron el decreto 4078 que fue el que autorizó la salida de las tropas militares y le autorizó a abrir fuego contra civiles.
Las autoridades de entonces los acusaron de intentar tomar la planta y hacer explotar los depósitos de combustible que había; las familias los acusan de desatar una masacre que dejó 10 muertos.