Trump y Biden retoman campaña rumbo a las urnas
Sin perder el tiempo, Donald Trump retoma su campaña política en busca un segundo mandato presidencial tras el cierre de una convención republicana muy ofensiva contra su oponente demócrata Joe Biden, quien volverá a recorrer EEUU después de meses de pausa por la pandemia.
El mandatario estadounidense visitó New Hampshire, un estado del noreste que perdió por poco en 2016, con la mirada puesta en las elecciones del 3 de noviembre, una carrera en la que está rezagado, según los sondeos.
Allí, pronunció un discurso ante sus seguidores, intentando reconectar con el público aunque la crisis sanitaria le impida organizar los grandes encuentros de los que disfruta.
El mensaje ya es conocido: el multimillonario republicano lo repitió la noche del jueves al aceptar la nominación del Partido Republicano, en un polémico discurso pronunciado en vivo desde la Casa Blanca, algo que ninguno de sus predecesores se había atrevido a hacer.
"Nadie estará a salvo en EEUU de Biden", aseveró Trump, de 74 años, en momentos en que su bando conservador denuncia la violencia del movimiento histórico contra el racismo y la brutalidad policial, revitalizado estos últimos días después de que un agente disparara siete veces por la espalda a un ciudadano negro en Kenosha, Wisconsin (norte).
Pero Trump, que repite una y otra vez que las encuestas actuales están equivocadas como lo estaban antes de su sorpresiva victoria hace cuatro años, también parece apostar por otro golpe de efecto: el posible anuncio de un vacuna contra la Covid-19 antes de la elección.
"Produciremos una vacuna antes de fin de año, ¡y tal vez incluso antes!", insistió.
"Derrotaremos al virus, acabaremos con la pandemia y saldremos más fuertes que nunca", aseguró el 45º presidente de EEUU, cuya gestión de la crisis sanitaria sumada a una histórica crisis económica ha sido fuertemente criticada, incluso entre sus filas.
BIDEN IRÁ A ESTADOS
Hasta ahora, sin embargo, esta estrategia ha beneficiado a Biden, quien aventaja a Trump en unos siete a ocho puntos en promedio en las encuestas nacionales y está a la cabeza en estados bisagra que definirán la elección, aunque en algunos casos por poco.
La convención demócrata de la semana pasada, virtual en nombre de la lucha contra el virus, mostró su voluntad de convertir este espíritu de responsabilidad en un argumento de campaña.
Por eso, el jueves dio una sorpresa al anunciar que reanudaría su campaña por estados claves, de forma presencial.
"Viajaré por el país. Iré donde sea posible respetando las reglas de los estados" sobre reuniones para limitar la propagación del coronavirus, dijo.