Sacerdote brasileño es sindicado de desviar millonarias donaciones
El sacerdote católico Robson de Oliveira Pereira, que es una celebridad en Brasil porque reúne a multitudes en sus misas, se aparta provisionalmente de sus funciones porque recientemente apareció metido en un escándalo por un millonario desvío de donaciones de los fieles.
El sacerdote de 46 años estará alejado de sus funciones como rector de la Basílica de la ciudad de Trindade y como presidente de la Asociación Hijos del Padre Eterno (Afipe) "hasta que todos los hechos sean aclarados", según un comunicado divulgado ayer por la Archidiócesis de Goaiana.
El sacerdote, uno de los fundadores de la Afipe y uno de los responsables por la Basílica del Divino Padre Eterno de Trindade, fue acusado de apropiación ilegal de recursos, asociación para delinquir, lavado de dinero, falsificación de documentos y evasión fiscal por el Ministerio Público del estado de Goiás (centro de Brasil).
Las acusaciones fueron anunciadas luego de una operación el viernes en la que fueron allanadas la sede de la Afipe y residencias de sus dirigentes, y de que la Justicia ordenara el embargo de 10,7 millones de dólares de las cuentas de esta entidad.
En su comunicado, el arzobispo de Goiania, Washington Cruz, se dijo "sorprendido" con la operación de la Fiscalía y con las acusaciones y afirmó que la Iglesia está "abierta para investigar con transparencia cualquier denuncia contra sus miembros".
Según el Ministerio Público, los dirigentes de la Afipe, entre ellos el sacerdote, han utilizado parte de las donaciones de los fieles para beneficio personal y hasta para comprar lujosas mansiones, una casa de playa y una hacienda.
El organismo afirmó en un comunicado que analiza un movimiento financiero de 303,6 millones de dólares hecho por la Afipe y dos entidades religiosas vinculadas, pero aclaró que no todo ese valor fue desviado.
"A partir del análisis de los documentos incautados será posible definir el valor que fue desviado", afirmó el fiscal Sebastiao Marcos Martins, responsable por la investigación, en una rueda de prensa.
EL CASO
El Ministerio Público informó que comenzó a investigar los posibles desvíos en 2019 luego de que el propio sacerdote denunciara haber sido víctima de una extorsión por la que tuvo que pagar 357.140 dólares a cambio de que no fueran divulgadas supuestas imágenes e informaciones personales y amorosas.
El hecho fue comunicado a la Fiscalía, que a partir de ese momento comenzó a investigar el origen de los recursos usados por el religioso para pagar a quienes lo extorsionaban.
De Oliveira, nacido en Trindade, ingresó al seminario de esa misma ciudad a los 14 años y vivió en Irlanda y en el Vaticano, en donde se formó en Teología Moral.
Desde su regreso a Brasil, en 2003, ejerce como rector del Santuario de Trindade, al que el papa Benedicto le concedió el título de Basílica y que cuenta con capacidad para 2.500 fieles.
El nuevo templo que pretende ser construido para la Basílica tendrá capacidad para 6.000 personas, según los planes de la Afipe, una entidad que controla una radio y un canal de televisión.