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Redacción central

El fuego se lleva 3 niñas de una familia humilde

Todo el mundo sabe que el fuego es peligroso, pero para la familia Mayta Nina el fuego el mortal porque en medio de seis años dos incendios cegaron la vida de sus tres hijas que murieron carbonizados por fuego infernal.

Ambos hechos sucedieron en la misma casa ubicada en la zona 16 de Febrero del sector norte de la ciudad de El Alto.

“Ya son tres hijas que pierdo y son dos veces que mi casa se incendia. Somos pobres, tenemos que salir a las calles para conseguir comida, ahora no sé con qué dinero voy a enterrar a mis wawas”, dijo el padre de las niñas fallecidas Néstor Mayta Nina, quien no pudo contener las lágrimas por la semejante tragedia que destroza su vida.

Al igual que la primera vez, cuando una bebe de dos años murió calcinada en otro incendio ocurrido el año 2016, ahora una vela provoca una nueva tragedia en esa familia de escasos recursos.

Agentes de la Policía realizaron el levantamiento del cadáver de las dos menores después de que ambas perdieron la vida en un incendio ocurrido dentro de una casa en El Alto.

“El primer cuerpo hallado se trata de una niña de tres años de edad, luego se encontró también a otra menor de nueve años, que sería la hermana mayor de la primera víctima”, informó el jefe de la División de Homicidios de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), Carlos Patzi.

EL SINIESTRO

El último hecho se registró aproximadamente a las 20.00 horas del pasado martes, cuando seis hermanos estaban encerrados en una pequeña habitación de casa, mientras sus padres y otros dos hermanos salieron a las calles a ganarse la vida trabajando como vendedores ambulantes.

Según las investigaciones, los hermanitos tienen las edades de 11, nueve, ocho, siete, tres y dos añitos estaban jugando y querían prepararse el tecito de la tarde para servirse con los panes que habían sobrado del día anterior.

Mientras los mayores estaban terminando sus tareas, los más chicos comenzaron a jugar con la vela, ya que la vivienda no tiene luz, comenzaron a quemar algunas pajas que salían del colchón donde dormían y en cuestión de segundos, el fuego alcanzó la colchoneta, a la ropa que había en el lugar y pronto se convirtió la chispa en fuego infernal.

Con la puerta cerrada y sin poder escapar, intentaron apagar las llamas con la poca agua que había en la tetera, pero no alcanzó. Los hermanitos se desesperaron y con lágrimas suplicaron por  ayuda a gritos por la ventana.

Los vecinos se percataron el humo negro que emanaba de la casa y tras escuchar los gritos abrieron a patadas la puerta principal y encontraron que la habitación se estaba ardiendo de forma incontrolable.

AYUDA

Los vecinos trataron de sofocar las llamas con baldes de agua e incluso, arriesgando su vida, uno de  ellos ingresó a la habitación para rescatar a los niños, logró sacar con quemaduras de primer y segundo grado a cuatro de los pequeños, pero dentro aún había dos niñas: Verónica (de tres años) y Rosalía (de nueve).

“Me puse una manta mojada en la cabeza para entrar, el fuego era muy fuerte, ya no se podía ver nada, pero sacamos a cuatro de los niños”, afirmó uno de los vecinos del lugar.

El otro vecino ingresó a la habitación y sacó aún con vida a la menor de tres añitos y murió la madrugada del miércoles debido a las quemaduras de tercer grado en su cuerpo; no obstante, por las intensas llamas, no logró encontrar a la hermanita de nueve.

Al cabo de dos horas de trabajo intenso, los vecinos y los bomberos lograron sofocar el fuego posteriormente, con la ayuda de la Policía se logró encontrar el segundo cuerpo de la niña, debajo de las cenizas. 

Las dos niñas fueron veladas en la sede social del vecindario y los vecinos recolectan recursos para ayudar a la familia que ahora se quedó sin qué comer ni casa donde dormir.

Años antes la misma familia fue victima de un incendio sucedido en la misma casa y en esa ocasión otra niña murió calcinada por el fuego.

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