Choferes logran paralizar El Alto
Como nunca antes en la historia sindical del transporte alteño, los choferes lograron paralizar la ciudad de El Alto y deciden radicalizar las medidas de presión hasta que las autoridades les den el visto bueno para nivelar los pasajes a 2 bolivianos como tarifa única.
Desde las primeras horas de ayer, los transportistas de la Federación Andina de Choferes Primero de Mayo de El Alto, amanecieron instalando puntos de bloqueo en calles, avenidas y puntos estratégicos de la urbe alteña.
El Comando de la Policía Regional, informó que los transportistas instalaron más de 40 puntos de bloqueo donde los choferes se concentraron para evitar la transitabilidad de los motorizados.
“Son más de 35 puntos de bloqueo y no tenemos el reporte de que los choferes hayan protagonizado excesos. Hemos visto que el paro está transcurriendo sin incidentes”, declaró el comandante de la Policía Regional.
Para hacer cumplir el paro, los choferes instalaron puntos de bloqueo en las avenidas Juan Pablo II, 6 de Marzo, carretera a Viacha y Laja por ser las avenidas troncales de esta urbe donde permanecieron hasta el final de la jornada.
“En ninguna parte del país ya existe pasaje de 1 boliviano, entonces no puede ser que los choferes de El Alto sigamos operando con una tarifa de 1 bolivianito y de paso los repuestos han comenzado a subir de precio y ya es insostenible seguir trabajando por un boliviano. Lo único que pedimos es que la gente es que sean conscientes”, dijo uno de los choferes que ayer comandaba un punto de bloqueo.
Los que sufrieron fueron los pasajeros que se dirigían a la ciudad de La Paz quienes tuvieron que caminar a pie desde la carretera a Oruro e ingresaron a sede Gobierno cargado de sus bultos y pedían a las autoridades a resolver el problema de una vez.
El mismo calvario sufrieron los que querían viajar urgente al interior del país y los que se trasladaban al Aeropuerto internacional de El Alto. “Estamos haciendo cumplir el paro a chicotes y vamos a chicotear a los rompehuelgas”, comentaba un transportista que sostenía entre sus manos un cinturón dispuesto para huasquear a los rompehuelgas y la gente utilizó motos y bicicletas para transportarse.