Analizan la muerte de Marco Antonio Aramayo
La muerte del exdirector del Fondo Indígena, Marco Antonio Aramayo, mientras se encontraba internado en un hospital, fue el resultado de una serie de “vulneraciones a sus derechos fundamentales”, según el Instituto de Terapia e Investigación sobre las Secuelas de la Tortura y la Violencia Estatal (ITEI).
A través de un pronunciamiento, la institución recordó la atención psicológica y seguimiento médico que se hizo a su caso desde 2017 con un trabajo de documentación de los hechos de tortura y violaciones a los derechos humanos a las que fue sometido durante los siete años que estuvo detenido preventivamente.
“Su muerte es la trágica conclusión de una serie de vulneraciones a sus derechos fundamentales que han afectado al señor Marco Antonio Aramayo, y que también afectan a las personas privadas de libertad en general. En consecuencia, consideramos urgente rememorar y denunciar estas vulneraciones”, se lee en parte del documento.
Según el ITEI, desde el momento que denunció las irregularidades del extinto Fondo Indígena en 2015, Aramayo fue “presumido culpable y estigmatizado socialmente por todas las autoridades estatales que se dignaron a aparecer en los medios de comunicación”.
Incluso, de acuerdo con el documento, cuando tuvo el atrevimiento de responder a las acusaciones de las autoridades gubernamentales, o señalar la responsabilidad de ciertos funcionarios de la institución que dirigía “el castigo fue inmediato”.
“Ya sea con visitas de desconocidos que lo amenazaban de muerte a él y su familia, ya sea con la fila de jueces y fiscales que se presentaron en el penal de San Pedro— con tal de incrementar lo que debía ser un solo proceso hasta alcanzar una cifra absurda de procesos por un mismo hecho”, añade.