Mal padre encierra a sus hijos en un cuarto
Dos hermanitos, Anahí de 5 y Yandy de 3 años de edad, fueron encerrados por su padre, sin alimentos dentro de una habitación alquilada, en la ciudad de El Alto; él les dijo que iría a buscar empleo, pero nunca más volvió.
“Supuestamente el progenitor habría alquilado una habitación y señala que estaría en busca de trabajo y dejó solos a los menores. La Defensoría hasta la fecha no pudo encontrar a los familiares”, afirmó el responsable del Albergue 24 horas de El Alto, Ángel Yampara.
De acuerdo con el reporte, el hecho se registró el 7 de agosto, cuando el padre soltero, decidió ir a buscar empleo y dejó solos a su suerte a los dos pequeños.
Les prometió que volvería cuanto antes y les dejó unos cuantos panes y té. La menor de sus hijos fue quien contó que, al principio ellos le pidieron acompañarlo, pero el padre se negó rotundamente.
Para evitar que lo sigan, el progenitor les prometió a Anahí y Yandy, que les traería muchos regalos y que volvería al día siguiente con comida.
PADRE INDOLENTE
La espera se hizo eterna y el descorazonado padre nunca más volvió, los días pasaron y los panes se acabaron al cabo de tres días. Los niños no paraban de llorar desesperados, porque estaban sin alimentos.
Al cabo de cinco días, fueron los vecinos quienes contactaron al dueño de casa para que venga y revise la habitación ya que el llanto de los niños cada vez era más lastimero.
El dueño de casa abrió la puerta y en el lugar encontró una escena desgarradora. Los dos hermanitos estaban en una cama tendida en el piso, al lado de ellos había un balde para hacer sus necesidades, acompañado de un olor fétido.
SIN COMER
Los chiquillos prácticamente estaban en los huesos, ya que no habían probado bocado desde hace casi una semana. Junto a los vecinos, el dueño de casa se contactó con la Defensoría del municipio alteño para rescatarlos.
Los menores fueron llevados a un albergue para que reciban alimentación y atención médica gracias a la denuncia de los vecinos que se solidarizaron y lloraron al verlos en esa situación.
Por la edad de los infantes, la Defensoría solo pudo recabar el nombre de los dos hermanitos; más no se sabe que fue de la madre y si tienen más familiares.
Según la hermanita mayor, su padre no tenía empleo y se dedicaba a la albañilería. No se tiene datos exactos de la madre y se pide a la población que ayude a encontrar a sus familiares para que puedan hacerse cargo de ellos.