Hallan muerto al hombre que asesinó a su mujer a picotazos
Fernando Meza de 42 años, fue hallado muerto en medio de los matorrales ya que el hombre escapó después de matar a su esposa y a su hijastra a picotazos. Los agentes de la policía anticrimen identificaron el cadáver por su diente de oro ya que los familiares del feminicida mencionaron que una de sus señas particulares era el brillo de su pieza dental.
Florentina Cordero O., de 36 años y su hijastra Adelaida Candía C., de 18 años fueron victimados el lunes en la población de Cotoca del departamento de Santa Cruz.
“Uno de los rasgos principales para identificar el cadáver fue una pieza dental recubierta de oro que el sospechoso tenía, ese dato fue dado por la familias de las víctimas y fue corroborada por distintas fotografías”, confirmó el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV), de Cocota, José María Velasco.
Fernando Meza A., 42 años, tras cometer el crimen más horrendo, huyó de su casa con destino al monte y se informa que utilizó un cable para colgarse de un árbol y así eludir a la justicia que andaba calcándole los pasos.
El cadáver fue encontrado en posición de cubito dorsal y se presume que cayó del árbol donde se colgó por su peso.
“Informamos al pueblo boliviano que se encontró el cuerpo sin vida del señor Fernando Meza, quien en fecha 13 de septiembre (2021) habría asesinado a Florentina y Adelaida. Poor las evidencias recolectadas presumimos que se trató de un suicidio que el hombre cometió al final de su vida”, escribió en su cuenta oficial de Twitter, el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo.
En el lugar estuvo presente la hermana menor de la fallecida quien reconoció al criminal y lamentó que se haya quitado la vida antes de responder ante la justicia.
“Hubiera querido verle la cara a ese asesino, mató a mi hermanita y a mi sobrina. Se mató el maricón”, lamentó con impotencia la familiar de las víctimas.
A PICOTAZOS
Según la información de la policía, el hombre anteriormente trabajaba como chofer del transporte público, pero debido a deudas y problemas personales, fue expulsado de su asociación y el pasado fin de semana se pegó una tremenda farra con los pocos ahorros de la familia.
El acusado llegó en su vehículo el domingo en la noche y exigió que le sirvan algo de comer, pero en lugar de eso, la esposa y su hijastra lo amenazaron con denunciarlo ante la Policía para que lo encierren en la cárcel por haber gastado la plata de la familia.
Discutieron toda la noche y después de unas horas, la madrugada del lunes, el furibundo sujeto salió de la habitación para ir a buscar sus herramientas, halló una picota oxidada y cual si “estuviera poseído” la tomó con las manos y fue a buscar a sus víctimas.
Tiró la puerta de una patada, entró enloquecido ante los gritos en busca de las mujeres y le clavó un picotazo en la espalda a su pareja ante la mirada de sus hijos. Mientras que la joven trató cubrir con su cuerpo a su progenitora y recibió también un certero picotazo en la cabeza.
Rastreado por canes
Los agentes de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv) rastrearon al asesino desplegando canes adiestrados e ingresaron al monte para encontrar al prófugo.
El jefe policial añadió que en el rastrillaje se desplazaron más de 100 efectivos especializados en trabajos de búsqueda.