Un hombre muere en los incendios del oriente
Las devastadoras llamas continúan en el oriente nacional y se cobra su primera víctima. Se trata de un hombre de 50 años quien murió por intoxicación de monóxido de carbono (humo) cuando estaba cuidando a su ganado y fue sorprendido por el fuego.
“Se ha registrado una víctima fatal debido a los incendios forestales desatados en el Pantanal boliviano”, confirmó el gerente de la Red de Salud de la provincia, Ángel Sandoval, Giovani Borth.
El fallecido respondía al nombre de Gumersindo L. V., que fue ingresado al Hospital Municipal de San Matías, el 30 de Julio a las 23.40 y murió el miércoles en horas de la mañana.
Gumersindo vivía en una hacienda cercana a San Fernando, comunidad que se ubica a 45 kilómetros de Candelaria y a 165 kilómetros de San Matías. Según medios locales, la víctima se dedicaba al cuidado del ganado en la estancia. El humo causado por el incesante fuego en el pantanal afectó sus pulmones.
A consecuencia de los incendios, se han evacuado numerosas cabezas de ganado de estancias ubicadas en la zona afectada. Sin embargo, los trabajadores de las haciendas permanecen al cuidado de las mismas a pesar de la cercanía de las llamas.
Según Borth, la víctima presentaba síntomas de shock séptico a consecuencia de una intoxicación por monóxido de carbono (humo). Se le hizo prueba de Covid-19 y fue descartado. Luego fue remitido al hospital de segundo nivel de San Ignacio de Velasco, donde falleció.
Se trataría de la primera víctima fatal a consecuencia de los incendios forestales.
En tanto, una comisión integrada por bomberos del Regimiento de Infantería 14 Florida y autoridades se trasladó hasta la localidad de Candelaria para coadyuvar en el campamento, donde además se espera la llegada de autoridades nacionales que harán una inspección en la zona para verificar la magnitud de los incendios.
CORTAFUEGOS
Ante el fuego incontrolable, la secretaría de Desarrollo Sostenible y Medioambiente de la Gobernación de Santa Cruz, Alejandra Sandóval, solicitó la ayuda de instituciones y hacendados para que aporten con maquinaria pesada en las labores de extinción de incendios forestales y los instructores de bomberos de la Gobernación cruceña sugirieron la estrategia de cortafuegos para contener el avance de las llamas.
En un primer incendio en San Matías se aplicó esa última solución para sofocar el fuego. Actualmente, se trabaja con orugas y motoniveladoras para trazar esas líneas y frenar los incendios en los parques nacionales de San Matías y el Valle de Tucabaca.
La llegada de la maquinaria a San Matías tomará más de 24 horas, pero supone un aliento para los voluntarios que permanecen en el área combatiendo los incendios.
La jefa de la Unidad de Bomberos de la Gobernación, Yovinka Rosado, explica la forma de trabajar con los cortafuegos. Dijo que los apoyos en el terreno de los instructores de la Gobernación permiten interpretar los informes satelitales que ofrece de forma diaria el Sistema de Alerta Temprana de Incendios Forestales (SATIF).
No obstante, el peligro y el temor es que las llamas alcancen a otros reservorios naturales y comunidades cercanas al bosque afectados y solicitan al Gobierno, la dotación de más equipo para evitar que el desastre se agudice.
INCENDIOS
Los trabajos para sofocar los incendios en la capital y provincias del departamento continúan y desde la Gobernación informaron que 111.543 hectáreas ya fueron afectadas. Los municipios más dañados son Roboré y San Matías, donde el fuego sigue avanzando y las maquinarias trabajan en a construcción de líneas de defensa para controlarlo.
BOMBEROS
Yovenka Rosado, jefa de las unidades de Bomberos Forestales, indicó que esta jornada se registraron cuatro incendios en Santa Cruz, de los cuales uno está en la zona de la avenida Lujan y otro por el kilómetro 13 de la doble vía a La Guardia, donde ya se han desplegado equipos de bomberos para controlar estas emergencias.
ZONAS AFECTADAS
Las otras dos zonas afectadas son el Área Natural de Manejo Integrado (AMNI) de San Matías y la Reserva municipal de vida silvestre valle de Tucabaca, en Roboré. En estos dos lugares, los trabajos de sofocación continúan para evitar que el fuego ingrese a las estancias ganaderas cercanas.