Envían a Chonchocoro al degollador de su expareja
Marcelino Martínez A., acusado de asesinar a su expareja, Wilma Flores Zurita, será trasladado a la cárcel de máxima seguridad Chonchocoro de La Paz, donde guardará detención preventiva por haber degollado a su expareja.
“Durante la audiencia, el Ministerio Público presentó los indicios colectados en contra del sujeto, como el informe de autopsia elaborado por el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF), que señala que la víctima falleció por trauma cervical por arma blanca, declaraciones testificales, colectó el arma blanca en el lugar del hecho”, confirmó el fiscal Departamental de Santa Cruz, Róger Mariaca.
La autoridad judicial informó que, en audiencia de medidas cautelares, el Ministerio Público fundamentó con indicios suficientes que el hombre es el presunto autor del delito de feminicidio cometido en contra de su expareja.
POR CELOS
Por su parte, la investigación apunta a que los móviles del hecho fueron los celos enfermizos que tenía el hombre, luego que ella decidió terminar su relación por violento.
El hecho sucedió al promediar las 10.30 del pasado domingo (4 de abril), cuando la mujer estaba realizando compras para sus dos hijos menores de siete y dos años, en el supermercado ubicado en la zona de la Doble Vía La Guardia, la mujer era seguida por su expareja quien la tomó por la espalda mientras que su brazo derecho agarraba un cuchillo y le cortó el cuello.
Mientras se desangraba, la mujer cayó al piso, donde el agresor continuó apuñalado repetidamente, según algunos testigos, el hombre se paró y la miró, arrojó el arma blanca y se escapó.
Ante los gritos de horror de los testigos, el guardia de seguridad del centro de compras logró interceptar al sujeto y fue detenido por la Policía, que dio parte al Fiscal de Materia. En horas de la tarde del domingo, el feminicida se abstuvo de declarar y se acogió al derecho de guardar silencio.
VIOLENTO
Según la investigación, el hombre ya tenía antecedentes por violencia intrafamiliar, ya que anteriormente, el sujeto golpeó a su expareja y a su suegra enfrente de sus hijos; fue denunciado por acoso y agresiones ante la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (FELCV) de Santa Cruz, en dos oportunidades y solicitó medidas de protección para ellas y su familia.
Lamentablemente, la Fiscalía de ese departamento, suspendió en dos oportunidades su declaración y el hombre quedó en libertad.
“Ya tenía denuncia, pero lo liberaron con chicanas, venía borracho y hasta drogado para pegarle a mi hermana, también golpeó a mi mamá (exsuegra del sujeto), es un tipo bien violento, la amenazó de muerte, pero aun así lo liberaron”, lamentó entre sollozos la hermana de víctima, Arminda Zurita.
Antes de su fatídico deceso, la víctima llamó a su hermana y le contó que se dio cuenta que el sujeto la estaba siguiendo.
"Me dijo que él (acusado) la estaba siguiendo. Yo le dije que iría a acompañarla, después la llamé y ya no me contestó. Esta desgracia se pudo evitar”, denunció Zurita.
Pidió “perdón”
Tras la audiencia cautelar en la que se abstuvo de brindar declaraciones, el homicida habló y pidió “perdón” por el homicidio de su exesposa. El juez que estuvo a cargo de la audiencia cautelar señaló que se incumplieron las medidas de seguridad que tenía la víctima.
“Pido perdón a la familia y a todas las personas que están viendo”, fueron las palabras de Marcelino Martínez A., el hombre que degolló a su expareja, en las puertas de un supermercado y que dejó en la orfandad a dos menores de edad.
A su turno, el juez Rómer Saucedo justificó que el agresor sea trasladado al penal de Chonchocoro en la ciudad de La Paz, pues en Palmasola, porque “su vida estaba en riesgo”, se limitó a decir. Confirmó que la víctima contaba con medidas de protección que fueron incumplidas y deberán de ser investigadas.