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Redacción Central

Un diplomático era el agente de Cuba

Su nombre es Víctor Manuel Rocha y es el mismo que el año 2002 cuando era embajador de Estados Unidos en Bolivia pidió al pueblo no votar por Evo Morales y ahora los agentes del FBI descubrieron que Manuel Rocha era un agente encubierto de Cuba en EEUU.

Casi 40 años después, en noviembre del año 2022, el FBI recibió información de que Manuel Rocha era un agente encubierto de la Dirección de Inteligencia de Cuba (DGI) y tenía la supuesta misión hacer el trabajo sucio en el país del norte accediendo a información secreta.

La punta del ovillo fue descubierta el 15 de noviembre del año pasado, una vez que Manuel Rocha recibió un mensaje de Whatsapp de una persona que se le presentó como un agente encubierto de Cuba, pero en realidad era “Miguel” quien un agente de inteligencia del FBI.

“Buenas tardes embajador, me llamo Miguel y tengo un mensaje para usted de sus amigos de La Habana. Se trata de un asunto delicado. ¿Está disponible para una llamada telefónica?”, decía el escueto mensaje del agente de inteligencia del FBI le envió a Rocha y este respondió con el siguiente mensaje. “No entiendo, pero puede llamarme”, respondió Rocha.

Ese mismo día, los dos hablaron por teléfono, la conversación que fue grabada por el personal de inteligencia de EEUU. Entonces, “Miguel” le comentó al agente de Cuba que había problemas “en la isla” y en “nuestra embajada en Santo Domingo” y le pidió sostener una secreta.

Entonces, los dos acordaron verse al día siguiente. Es decir, el 16 de noviembre de 2022 frente a la Primera Iglesia Presbiteriana de Miami en el barrio de Brickell. La hora de la reunión era a las 10 de la mañana y conversación fue grabada en audio y video.

Mientras se desplazaba al lugar de la reunión, Manuel Rocha realizó una ruta de detección de vigilancia como le habían enseñado los de Inteligencia de Cuba. “Concretamente, las fuerzas del orden observaron que Rocha tomaba un camino indirecto, más largo y tortuoso hacia la iglesia, en lugar de ir directamente. Además, entre otras cosas, se detuvo durante la ruta en un lugar durante varios minutos para poder observar el lugar de la reunión desde una distancia segura.

Durante el encuentro, el presunto agente de Cuba, se presentó como “un representante encubierto destinado a Miami”, cuya misión era “contactar con usted, presentarme como su nuevo contacto y establecer una nueva planta de comunicaciones”.

“Quiero que le digas a mis ‘Compañeros’ que aprecio y agradezco mucho esta alerta”, es lo que dijo Rocha en la reunión y explicó que durante su último contacto con la DGI, “pudo viajar a la capital y estando allí tuve una larga reunión en La Habana”.

Asimismo, le dijo a “Miguel” del FBI que en sus conversaciones iniciales no deberían hacer mención a “La Habana”: “Tenemos otro nombre. Nunca utilizamos La Habana. Suelo decir ‘La Isla’. Nunca utilizo Cuba o Habana”. Y agregó: “Desde la Dirección me pidieron que llevara una vida normal y hasta ha creado la leyenda de que soy una persona de derecha”. (Con datos de Infobae)

 

 

 

ROCHA CANTA TODO

Todos saben que la ley de un agente secreto “es hablar poco y escuchar todo”, pero Manuel Rocha se confió de que estaba frente a otro agente de Cuba y ese día habló todo y hasta contó que fue a la Habana el 2016 y 2017. “Entré como dominicano”, refiriéndose a que usó su pasaporte de República Dominicana.

Antes de terminar la reunión, el Manuel Rocha se confesó que trabajó como agente secreto de Cuba 40 años “Fueron décadas (...), décadas que fueron profundas. Casi 40 años (...) de mucho peligro”, dijo airoso y feliz de lo que hacía.

 

 

MUY CONFIADO

Rocha cantó todo: “Me da mucho orgullo y satisfacción ver que gente como Miguel, que es mucho más joven, pero que están ahí haciendo esto, que no es fácil. No es fácil, es una lucha (...) Esto es un sacrificio enorme, con mucha tensión que tienes que manejar internamente, con autodisciplina, todo el tiempo”.

Finalmente, Rocha aceptó reunirse con el agente encubierto del FBI entre el 10 y 17 de febrero de 2023 y propuso otro lugar de encuentro, en lo posible en Santo Domingo allá donde se reúne la gente pobre “en un patio de comidas”.

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