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Redacción Central

Buscan a los asesinos del joven William Wallas

Agentes de la policía anticrimen de El Alto, buscan a los asesinos que apuñalaron al joven William Wallas Guarachi, quien murió desangrado en plena pasarela del Arquitecto la semana pasada.

William Wallas Guarachi de 22 años, murió apuñalado en plena pasarela del Arquitecto de la Ceja alteña y a plena luz del día. Sus familiares cuentan que era un joven trabajador de quien su único delito fue madrugar para ir a vender su mercadería.

“Mi hijo salió temprano, se cambió y se fue rápido a vender una chamarra”, contó la madre de William.

Al día siguiente de su muerte, sus amigos, parientes y sus padres, William fue enterrado en medio de gritos que pedían justicia y cadena perpetua para los antisociales que acabaron con los sueños del joven que estudiaba dos carreras: electrónica y mecánica.

“Era bien alegre, le gustaba estudiar, no hacía renegar. En la tarde, a las 12 ya no ha llegado a almorzar y me he preocupado. He visto en el Facebook (el crimen) y lo he visto parecido a mi hijito, No, no ha llegado me dijo mi esposo. Mi hija mayor lo había mirado en la tele y me dijo, era mi Wallitas", agregó con lágrimas de impotencia la mamá de la víctima. 

Contó que William puso a la venta una chamara semi nueva por medio de Marketplace, consiguió un comprador que le ofreció 50 bolivianos por la prenda. El joven aceptó y el comprador pactó una cita en la Ceja.

Tenía que encontrarse con el “comprador” a las 06.30 de la mañana del lunes, en inmediaciones de la pasarela. Su papá se ofreció a llevarlo hasta el lugar, porque a esas horas, hay pocas personas por el lugar. William dijo no y decidió ir solo a la cita. “Yo le dije que le iba a llevar, estaba preparando el auto, pero él se fue porque ya estaba atrasado”, lamentó su padre.

Según la investigación preliminar, el joven fue detectado por cinco antisociales que, al verlo solo, lo persiguieron para asaltarlo entre las calles 1 y 2 de la Ceja. La víctima trató de escapar al ver el peligro y subió a la pasarela, donde finalmente fue interceptada por los malhechores.

Atenidos a su superioridad numérica, los ladrones golpearon a William que trató de defenderse como pudo, hasta que uno de los delincuentes, sacó un arma punzo cortante y lo apuñaló cinco veces, mientras los demás lo sujetaban de los brazos.

La víctima cayó al piso y los delincuentes aprovecharon para robarle el poco dinero que tenía en sus bolsillos y escaparon cobardemente para refugiarse entre las calles del lugar. Minutos después, William murió desangrado ya que el puñal atravesó órganos vitales.

CÁMARAS INSERVIBLES

Los agentes de la Policía llegaron al lugar, pero tropezaron con el problema de que los fiscales llegaron a la escena del hecho recién a las 09.00 de la mañana para autorizar el levantamiento del cadáver.

El segundo problema para los investigadores fue que las cámaras de seguridad el sector, ya no sirven por falta de mantenimiento.  “Hemos tratado de recolectar las imágenes de la cámara de vigilancia de las calles, pero lamentablemente no funciona, a pesar de eso seguiremos investigando para dar con los responsables”, afirmó el jefe de la dirección de Homicidio de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), Daniel Choque.

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