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Redacción Central

Desde la cárcel falsificaban certificados de la UPEA

Desde la cárcel de San Pedro, un reo dirigía una banda de falsificadores quienes se dieron a la tarea de “adulterar” los certificados de la Universidad Pública de el Alto (UPEA) y las vendían como pan caliente.

“El ciberpatrullaje logró establecer que los documentos eran vendidos a 80 bolivianos, aunque el costo bajaba si se pedía en cantidad”, informó el director departamental de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), Rolando Rojas.

Las ofertas eran publicadas por un interno del penal de San Pedro, identificado como Henry C., mientras que su hermano, que se dedicaba a entregar los documentos a sus compradores que también eran estudiantes.

DENUNCIA

La investigación surgió a raíz de una denuncia de algunas personas sobre que en Marketplace de Facebook (mercado libre de esa red social), ofrecían títulos y certificados académicos con el sello de la universidad alteña.

Efectivamente, los investigadores de Ciberpatrullaje de la FELCC encontraron una cuenta de Facebook falsa con el nombre de “Harry” que ofrecía desde certificados, talleres y cursos en diferentes ramas de las carreras universitarias.

Hacían certificados a gusto del cliente, se podía obtener talleres desde pasantías en economía, capacitaciones en administración de empresas, talleres con oradores internacionales y cursos de locución que eran ofrecidos a solo 80 bolivianos la unidad.  

Incluso, los avezados delincuentes usaron sellos falsos de la Federación Universitaria Local (FUL) para darles “legitimidad” a los documentos que ofrecían.

Cobraban 80 bolivianos a veces más dependiendo del taller. Además, si uno los compraba por mayor, el precio bajaba hasta los 60 o 70 bolivianos, dependiendo de cuantos certificados se requirieran. Cuatro documentos podían llegar a valer 300 bolivianos.

LA TRAMPA

Con esa información, uno de los agentes encubiertos se hizo pasar por un estudiante interesado en los certificados y les pidió que le vendan en mayor cantidad.

Tras pactarse una cita, los investigadores entraron en acción. Citaron al vendedor en inmediaciones del edificio de la misma UPEA de El Alto.  Una vez que se detectó al sospechoso y tras realizar la compra y venta, el hombre fue interceptado por los agentes del orden.

Tras una revisión se halló en su poder más de 813 certificados, talleres y seminarios de diferentes especialidades y cursos. Todos ellos con sellos de la UPEA y de la FUL.

El sospechoso no supo explicar su procedencia y en su declaración, admitió que los vendía con la ayuda de su hermano que se encuentra recluido en la cárcel de San Pedro.

En las últimas semanas, también se aprehendió a dos mujeres implicadas, una de ellas que tenía 10 certificados en su posesión. “En total, existen tres personas aprehendidas y una persona más arrestada (que sería un comprador que fue interceptado junto con las dos mujeres), además del sujeto que publicaba las ofertas y que se encuentra encarcelado”, explicó el coronel Rojas.

El jefe de la FELCC anunció que se seguirán las investigaciones para constatar si existen más implicados en el caso. Además, se investiga cómo fue que el privado de libertad y sus familiares obtuvieron los sellos de la UPEA y de la FUL para hacer las falsificaciones.

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