Gobierno evitará que el país sea paralizado
Ante el anuncio de nuevas movilizaciones del opositor “bloque de unidad”, el ministro de Defensa Edmundo Novillo advirtió ayer que como gobierno nacional serán muy firmes para evitar que grupos de poder y sus operadores políticos paralicen y destruyan la economía nacional utilizando paros y bloqueo de caminos.
“Queremos decirles de manera franca y categórica: como Movimiento al Socialismo, como gobierno de la revolución democrática y cultural, somos un fuerte regimiento en el país, estamos en el gobierno nacional, en los gobiernos departamentales, estamos en nuestras organizaciones sociales y queremos decirles que como gobierno nacional vamos a ser muy firmes. En el marco del Estado de Derecho vamos a evitar por todos los medios que nuestro país sea azotado, paralizado y víctima de la destrucción económica de estos grupos de poder”, dijo al canal estatal.
Sostuvo que, a partir de los comités cívicos, ciertos grupos de poder comprometidos con el gobierno de la dictadura utilizaron a los gremiales, transportistas y cooperativistas mineros para movilizarse en rechazo a la Ley Contra las Ganancias Ilícitas que fue retirada para evitar la confrontación entre bolivianos y preservar la estabilidad social y política, indicó.
Explicó que luego de retirada la ley, los comités cívicos cambiaron de estrategia demostrando que no era el problema la ley, sino que detrás hay una “acción conspirativa” destinada a desestabilizar al gobierno, a la economía y generar un daño económico al empresario, microempresario, comerciantes, gremialistas y transportistas.
Sostuvo que el proyecto de ley tenía el propósito de luchar contra los delitos transnacionales como el lavado de dinero provenientes de actividades delictuales, no informales, como el narcotráfico, venta de armas y trata y tráfico de personas.
Advirtió que, si no se luchan contra esos delitos con unas normas de carácter internacional, “Bolivia se va a convertir en un país donde la actividad ilícita genere desconfianza y no se puede condenar a nuestro país, en el marco de las relaciones internacionales y comerciales, a que esté sometido a una desconfianza porque esto sí tiene consecuencias, particularmente para los empresarios y las inversiones”.