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Redacción central

Lenocinios clandestinos se dan modos para romper la cuarentena

Autoridades de la intendencia municipal de El Alto, informan que los dueños de los lenocinios clandestinos se dan modos para romper la cuarentena sin importar el peligro al que exponen a sus trabajadoras y a sus clientes que visitan estos lugares que funcionan en pésimas condiciones de salud

Por ejemplo, en menos de un medio, la Policía y la Intendencia Municipal intervinieron el lenocinio “Cholitas Wrestling” (Show Popular) que funciona en la avenida Franco Valle y calle 5 de la zona 12 de Octubre.

“Esta es la segunda vez que se interviene este lugar, el administrador fue aprehendido y conducido hasta las celdas de la FELCC acusado de delitos contra la salud pública, también se detuvo a 12 personas, seis trabajadoras sexuales (cholitas) y sus clientes”, informó el jefe de la División Personas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de El Alto, Edwin Kantud.

Por su parte, el intendente Municipal Arturo Sejas informó que el lugar funcionaba en condiciones de insalubridad y se encontró gran cantidad de bebidas alcohólicas, por lo que se incautó todo el mobiliario, camas, colchones, frazadas, mesas, sillas y equipos de sonido.

“El lugar es insalubre, las trabajadoras sexuales atendían a sus clientes en medio de olores nauseabundos, colchones viejos, sábanas manchadas, las trabajadoras sexuales no tenían su registro sanitario y no usaban preservativos, poniendo en riesgo a sus clientes por el contagio de coronavirus, pero además enfermedades venéreas”, dijo.

El lenocinio fue clausurado por la Intendencia el 6 de junio pasado, sin embargo, 13 días después y sin reparo alguno volvió a abrir sus puertas a partir de las 07.00 hasta las 15.00 horas, ofreciendo sus acostumbrados shows desnudistas de cholitas, que eran ofertadas al mejor postor.

A denuncia de los comerciantes y vecinos, la Policía llegó hasta el lugar donde sorprendió a las trabajadoras sexuales de pollera y sus clientes justo en el momento en el que realizaban el espectáculo erótico, en medio de la euforia de los clientes varones quienes cual, si fuera una subasta, ofrecían dinero al administrador para contratar los servicios de las trabajadoras nocturnas.

CUARENTENA

La cuarentena prohíbe que los prostíbulos y otros locales funcionen por las noches, por lo que las trabajadoras de este rubro cambiaron sus horarios para burlar las restricciones y ahora atienden a sus clientes desde 09.00 de la mañana hasta las 18.00 horas. Así los parroquianos tienen buena parte del día para visitar los prostíbulos clandestinos aun recorriendo largas distancias.

Empero de nada sirvió la incautación, pues como siempre pasa, los administradores de los prostíbulos renuevan sus muebles, camas, colchones para continuar con su ilícita actividad.

Según el registro de El Alteño, en lo que va de esta cuarentena por la emergencia sanitaria de la Covid-19 en la urbe alteña ya se intervinieron ocho lenocinios.

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