Exmilitares molestos con la detención de sus camaradas
Ante las recientes detenciones de dos exjefes militares por el caso “golpe de Estado”, el general de División Aérea del Ejercito en servicio pasivo, Tomas Peña y Lillo, advierte que los operadores políticos y judiciales “están hurgando el avispero en forma muy peligrosa” por los abusos que se están cometiendo contra las Fuerzas Armadas.
Recientemente fueron aprehendidos y enviados a detención preventiva el excomandante del Ejército, general Iván Inchauste, y el jefe del Estado Mayor de las FFAA, general Pablo Guerra, bajo cargos de supuesto homicidio y otros por los hechos de violencia ocurridos en Senkata y Sacaba en noviembre de 2019.
Peña y Lillo Tellería en su calidad de miembro del directorio de la Unión de Militares del Servicio Pasivo filial Santa Cruz, dijo que están analizando los alcances de esta persecución política contra personal militar, y lógicamente, cuáles serán las medidas que van a tomar “para detener este abuso de parte de las autoridades”.
Dijo que en la crisis política del 2019 las Fuerzas Armadas evitaron una guerra civil, y lejos de enaltecer y agradecer esa actitud, hoy son juzgadas en un proceso donde se amnistía a una de las partes y se juzga a la otra. Afirmó que, si hubiera alguna responsabilidad de algún jefe militar, éste debería ser juzgado por tribunales militares y no por la justicia ordinaria.
Sostuvo que los procesos judiciales están viciados de inconstitucionalidad porque directamente la sentencia ya está dictada. Y ¿vamos a aceptar eso”, se preguntó. Dijo que en el sector pasivo hay una indignación a raíz de los abusos que se están cometiendo y por el desprecio absoluto hacia las Fuerzas Armadas y en el sector activo nota que la gente está cada día más preocupada.
“Da la impresión que tuviéramos enemigos en el gobierno; las FFAA no están para servir al gobierno sino para servir a la patria, da la impresión que esta gente del gobierno no se está dando cuenta de eso y se está confundiendo”, declaró a Erbol.
Considera que las Fuerzas Armadas no tienen por qué pagar los platos rotos de los políticos que no se ponen de acuerdo y toman a la institución militar como chivo expiatorio. Recordó que ya antes entraron a la cárcel algunos generales y advirtió que eso “no eso no puede volver a repetirse”.
“Nos quieren meter la idea de una masacre, pero es falso. En la masacre ¿cuál es la idea principal? Es aquél que ha sido herido o muerto bajo condiciones de absoluta falta de defensa. Aquí ¿quién pues los citó a tirar piedras o intentar entrar a Cochabamba o intentar destruir Senkata? Si se fijan, todo el mundo dice que estaba yendo a comprar pancito ¿dónde estamos?”, manifestó.
Anticipó que insistirán en el traslado de los procesos a la justicia militar porque la jurisdicción ordinaria está enviado a los generales al lado de los delincuentes, es decir, se trata de humillar, de aplicar venganza y menoscabar a las FFAA, puntualizó.
Desde su experiencia militar, el único que debería ser citado es el excomandante en jefe de las FFAA Williams Kaliman, por tener responsabilidad de mando en ese momento. Sin embargo, el Servicio Pasivo ve que hay una persecución política mediante jueces y fiscales que no tienen idea de lo que es un asesinato y un homicidio y en todo momento hacen ver como si los militares fueran asesinos.
Anunció que tomarán las medidas necesarias porque da la impresión que el actual Comando en Jefe no se da cuenta que se está juzgado el rol de las FFAA, se la está atropellando y humillando conscientemente. (Erbol)