Suspenden a policía condecorado por la captura de Misael Nallar
El mayor Álvaro Julio Muñoz y el capitán Rubén Aparicio fueron suspendidos de sus cargos en la Policía Boliviana por orden del coronel Augusto Russo, inspector general de la entidad verde olivo, quien confirmó que ya no están cumpliendo funciones y están esperando un nuevo destino o disposición.
"Hay determinaciones que ha tomado el mando, en este caso la dirección de la Felcn, para suspender a estos dos funcionarios", manifestó Russo, al exponer que se tomarán los recaudos necesarios para garantizar el debido proceso respecto a este tema y referir que los cambios generan mejora y han de permitir que la percepción de la ciudadanía hacia la Policía cambie.
Lo curioso del tema es que la semana pasada, el mayor Álvaro Julio Muñoz, fue reconocido con el 'Premio a la Excelencia Policial', gracias a la aprehensión de Misael Nallar, acusado de la muerte de dos policías y un voluntario Grupo de Apoyo Civil a la Policía Boliviana (Gacip). Sin embargo, extraoficialmente se conoce que Nallar se entregó y no fue detenido por las fuerzas del orden.
Muñoz recibió la distinción de manos del ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo y del recientemente destituido comandante de la policía general Jhonny Aguilera.
Sin embargo, los nombres de Muñoz y del capitán Rubén Aparicio aparecieron en medio de las investigaciones a Nallar, yerno del narcotraficante Einar Lima Lobo, y principal autor de la muerte de los efectivos en Porongo, sobre una supuesta complicidad con el aprehendido.
Esta información fue negada por el propio Muñoz, pero el asunto tuvo sus consecuencias y por ello fue suspendido. El ahora excomandante general de la Policía, Jhonny Aguilera, en su discurso destacó que el reconocimiento a Muñoz era un homenaje al "policía del año", porque "es una policía de excelencia".
Entre tanto, el anuncio se da después de que la defensa de Misael Nallar solicitara que se convoque a declarar a Muñoz y que se secuestre su celular, donde presuntamente existe evidencia en la que se acuerda que Nallar se iba a entregar voluntariamente.
EL PEDIDO
Hace días, el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, anunció que pedirá la pena máxima de 30 años de prisión sin derecho a indulto para Misael Nallar, el principal acusado del asesinato de dos policías y un voluntario del Gacip.
El anuncio se produjo a 10 días del crimen que destapó dudas sobre un posible encubrimiento policial al narcotráfico y de nuevas tensiones políticas al interior del Movimiento Al Socialismo (MAS).
“No tenemos nada que ocultar y vamos a seguir trabajando de manera transparente. Felicitamos a la institución Verde Olivo, exceptuando a algunos malos efectivos policiales. La Policía Boliviana quiere saber realmente lo que sucedió y vamos a hacer lo que, además, está pidiendo el pueblo boliviano; vamos a buscar justicia. Esos 30 años sin derecho a indulto es nuestra meta, es lo que corresponde”, afirmó Del Castillo en un acto en el que no estuvo presente el ahora excomandante general de la Policía, el general Jhonny Aguilera.
Los policías asesinados son Eustaquio Olano, Alfonso Flores Chávez y del voluntario del Gacip, José David Candia Orozco.